La empresa matriz de la cadena mundial de tiendas de conveniencia 7-Eleven rechazó una oferta de adquisición de casi 39.000 millones de dólares (29.600 millones de libras esterlinas) de un rival canadiense, argumentando que “subvalora enormemente” a la empresa.
El mes pasado, Seven & i, con sede en Tokio, reveló que había recibido una oferta de Alimentation Couche-Tard, preparando el escenario para lo que podría ser la mayor adquisición extranjera de la historia de Japón.
7-Eleven se ha convertido en una de las empresas de tiendas de conveniencia más grandes del mundo, con más de 84.000 tiendas en 19 países, incluidas 13.000 en Estados Unidos y 22.000 en Japón.
El viernes, el grupo japonés envió una carta a Couche-Tard diciendo que la propuesta de un acuerdo en efectivo de 14,86 dólares por acción “no period lo mejor para los intereses de… los accionistas y otras partes interesadas”.
Sin embargo, la compañía, que dijo que la posible competencia y los riesgos regulatorios eran una preocupación importante, dejó la puerta abierta para aceptar una oferta más alta.
“Estamos abiertos a entablar conversaciones sinceras si nos presenta una propuesta que reconozca plenamente nuestro valor intrínseco independiente”, afirmó Stephen Dacus, presidente del consejo de administración de Seven & i, en la carta. “Sin embargo, no creemos que… la propuesta que ha presentado nos proporcione una base para entablar conversaciones sustanciales”.
Dacus, que también preside un comité especial creado para examinar la oferta, dijo que la oferta de Couche-Tard fue “oportuna y subestima enormemente” el valor de 7-Eleven.
Además, la compañía dijo que incluso si se mejorara la oferta, aún así no “reconocería adecuadamente los múltiples y significativos desafíos que dicha transacción enfrentaría por parte de la aplicación de la ley de competencia de Estados Unidos”.
Couche-Tard, con sede en Montreal, propietaria de la cadena rival de tiendas de conveniencia Circle Okay en Estados Unidos, cotiza en la Bolsa de Valores de Toronto y tiene más de 16.700 tiendas y estaciones de servicio en 31 países.
La oferta fue uno de los primeros intentos de adquisición después de que el gobierno japonés suavizara las normas el año pasado, dificultando que los consejos directivos ignoraran las ofertas no solicitadas. Las normas anteriores facilitaban a los directores ejecutivos y directores bloquear las ofertas que iban en contra de los intereses de los accionistas.
En la empresa junta anual de accionistas El jueves, los ejecutivos de Couche-Tard dijeron a los inversores que seguían “confiando” en su “capacidad para financiar y completar esta combinación”, pero también dijeron que habían “abandonado muchos más acuerdos de los que cerramos”.
Se ha especulado que parte de la defensa de 7-Eleven podría ser presentar a la cadena nacional como una parte esencial de la infraestructura de apoyo ante desastres de Japón, en un país que experimenta hasta 1.500 terremotos de gran magnitud al año.
En la carta del viernes, el grupo japonés dijo que si bien Couche-Tard reconoció “el papel essential que 7 & i desempeña en la vida cotidiana en Japón… esta es claramente un área que requeriría mayor discusión si llegáramos a ese punto”.